¿Puede la Patria ordenar a una persona que sea el guardián de su memoria? ¿Tiene el derecho de hacerlo? Y, si así fuera, ¿esa persona puede negarse? Al fin de cuentas, ¿qué es la Patria y qué es la memoria? Estos son algunos de los interrogantes que enfrenta Godofredo Mansilla, un hombre que asume el deber de relatar el surgimiento y la perdición del último mito nacional, entendiendo que allí se cifra la tragedia de la Argentina actual. La tarea no está exenta de ambivalencias, porque, para culminarla, Mansilla se ve obligado a revelar su propio drama.

En una historia por momentos desopilante, los sucesos hilvanan una trama en la que convergen la literatura policial, la literatura psicológica, la historiografía y la cultura de masas. El resultado es una lectura entretenida.

Esta es la primera novela de alguien que advierte que no es un escritor sino un individuo que escribió una novela y que, en algún momento, puede reincidir.

El desvelo del guardián recibió una mención de honor en el concurso del Fondo Nacional de las Artes, del año 2008. El jurado que otorgó esta distinción estuvo integrado por Guillermo Martínez, Ana María Shúa y Juan Martini. En esa primera versión, la obra se titulaba Memoria de la Patria y, desde entonces, ha experimentado sucesivas modificaciones hasta llegar a la versión definitiva, que aquí se publica.